Las salas de rehabilitación respiratoria y física, fueron diseñadas en los centros de salud municipales en el año 2021, para atender principalmente a pacientes con secuelas del COVID. Con el tiempo se han ido adaptando para tratamientos relacionados con distintas enfermedades y sumando esta nueva inversión, esperan atender a más de 2.700 usuarios al mes.
Francisco Martínez, Sub Director de la Corporación de Salud de Puente Alto, comenta que las salas se adaptaron al interior de los gimnasios de los centros para la rehabilitación física y respiratoria de pacientes. “Entendiendo que muchas personas post Covid quedan con alguna secuela respiratoria, con algún problema de habla, con algún problema causado por la intubación en la UCI al estar mucho tiempo acostados, se le hace rehabilitación física con un kinesiólogo y con el terapeuta ocupacional para que recuperen sus capacidades y puedan seguir con su vida normal o volver a su vida laboral que también es muchas veces el problema principal”.
El profesional agrega que adicionalmente, cuentan con tres salas de psicomotricidad infantil, “son salas para atención en psicoestimulación de niños con trastornos espectro autista, una población bastante olvidada en cierta forma por nuestro sistema de salud y nosotros podemos justamente aportar con las atenciones. Tenemos un equipo multidisciplinario con fonoaudiólogo, kinesiólogo, terapeuta ocupacional y una psicomotricista especialista en el desarrollo y en las habilidades que les podemos entregar como herramientas a los padres también de estos niños, generando una estimulación temprana y un desarrollo mucho más fisiológico, más normal en el resto de su vida”.
En tanto, el alcalde de Puente Alto, Germán Codina, destacó la alianza público privada para mejorar la atención de los vecinos. “Estoy muy contento, que, junto al equipo municipal de la Corporación de Salud, hayamos podido sacar adelante esta iniciativa, que también contó con financiamiento del Servicio de Salud, Metlife Chile y Desafìo Levantemos Chile, en una alianza público privada que yo valoro mucho. A veces la gente está muy acostumbrada a que entre todos peleen, se demonice desde lo público a lo privado y desde lo privado se demonice lo público. Aquí lo que hay es un trabajo conjunto, porque lo que nos interesa es dar una mejor atención, una atención de calidad, por eso también el municipio hace un esfuerzo enorme financiando a los equipos de profesionales, que les brindan una atención con cariño y eficiencia a todas nuestras vecinas y vecinos que nos necesitan”.
Beneficio, que agradece Hugo Soto, usuario del Cesfam Karol Wojtyla “es una maravilla porque yo soy un rehabilitado, estuve intubado 20 días en el Sótero del Río y después me derivaron al Cesfam, de aquí en el consultorio de mi barrio en el cual me atendieron súper bien y me ayudaron a vivir de nuevo, porque nací de nuevo”.